21 julio 2006

creyentes o no creyentes

Ante la muerte de un ser querido, la religión es un consuelo , da esperanza e ilusión, todos piensan que esa persona ha sido buena y aunque no fuera muy creyente, todos acaban pensando que ira al cielo, desde los mas practicantes, a los que solo pisan la iglesia para un bautismo, una comunión o boda.

Es donde agarrarse para seguir con su vida, es su defensa psicológica, es la esperanza que estar con Dios

Pero...... y los no creyentes , no tenemos ese peldaño donde sentarnos, no poseemos la fe de que esta en ningún sitio, nos planteamos muy duramente en eso momentos de dolor y de tristeza infinita, si no hay nada detrás de la muerte , que mierda de vida es esta, padecemos por familiares, amigos, porque hemos de cambiar el mundo para los que venga detrás pero y nosotros?. ¿Qué hacemos con nosotros mismos? Si pensamos que somos materia y energía, cuando esta se acaba, solo seguimos viviendo en el recuerdo de quien nos quería, eso si no están ocupados sacando su vida adelante.

Joanna 21 julio 2006

4 comentarios:

Anónimo dijo...

La energía ni se crea ni se destuye, solo se trasnsforma por lo tanto nuestra parte de energía se transformará en nuestra muerte, pero la cuestión es ¿en que? y esa energía ¿será inteligente? esas son las preguntas que me hago de vez en cuando.
Saludos.

Miguel
CamarónDeCai

Anónimo dijo...

soy de esos extraños personajes que sí creen en algo; en mi caso, católico me define. por desgracia para mis correligionarios más ortodoxos, soy bastante preguntón y escucho de aquí y de allá, lo que cada cual pueda decir como "su verdad". la versión católica ya la conoces, así que no la cuento, pero es curioso que siendo tú una mejillona, te cuestiones algo así sin poner más interrogantes que simplemente "vida/muerte", "alma/energía", "fin de todo/ no fin de todo"... creo que tienes más cosas en la cabeza (o al menos, deberías) como para tener más interrogantes, más respuestas parciales, más dudas y alguna que otra intuición ¿no? :) piensa coñe jajajaja

Anónimo dijo...

Tal vez todo radica en el concepto de "muerte".
Para mí, esa palabra es exactamente el fín de la vida, sin más. A menudo se acude a frases tan científicas como "la energía ni se crea ni se destruye, sino se transforma" y casi inevitablemente, esos creyentes tanto religiosos como en "vidas allende ésta" se apoyan. Pero lo cierto es que somos materia, y muertas nuestras células, empieza una descomposición sistemática que la misma naturaleza la necesita para que la VIDA continúe. Así que nuestra muerte es aprovechada para otras vidas.
La verdad es que no es nada romántico, pero éste quien escribe, no teme a la muerte como tal, sino más bien al dolor que pueda causar en los seres queridos, en mi ausencia. Aunque claro, ese dolor también puede convertirse en gozo en otros, y es que, así es la vida.

patriconde dijo...

lo bueno de la muerte es que uno no sabe que viene despues, es toda una aventura